Serpina

Serpina controls hypertension, anxiety and tension.

Product dosage: 60caps
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Serpina es un medicamento antihipertensivo de prescripción, indicado para el manejo de la presión arterial alta. Su principio activo, la reserpina, actúa disminuyendo las catecolaminas en las terminaciones nerviosas, lo que resulta en una reducción sostenida de la tensión arterial. Este fármaco está respaldado por décadas de uso clínico y está indicado como parte de un régimen terapéutico integral que incluye modificaciones en el estilo de vida. Su perfil farmacológico lo convierte en una opción valiosa dentro del arsenal terapéutico para el control de la hipertensión.

Características

• Principio activo: Reserpina.
• Presentación: Comprimidos de 0.1 mg y 0.25 mg.
• Clase terapéutica: Alcaloide del Rauwolfia serpentina, agente antihipertensivo y tranquilizante.
• Mecanismo de acción: Agotamiento de las catecolaminas (noradrenalina, dopamina, serotonina) en las vesículas de almacenamiento de las terminales nerviosas periféricas y centrales.
• Biodisponibilidad: Alta absorción oral.
• Vida media de eliminación: Aproximadamente 100 horas (larga duración de acción).
• Excreción: Principalmente renal y fecal.

Beneficios

• Proporciona una reducción gradual y sostenida de la presión arterial sistólica y diastólica.
• Ayuda a disminuir la frecuencia cardíaca, reduciendo la carga de trabajo del corazón.
• Contribuye a la prevención de complicaciones a largo plazo asociadas con la hipertensión no controlada, como accidentes cerebrovasculares, infartos de miocardio e insuficiencia renal.
• Ofrece un régimen posológico conveniente, generalmente una o dos veces al día, mejorando la adherencia al tratamiento.
• Puede ser utilizado en combinación con otros agentes antihipertensivos para un control óptimo de la presión arterial.
• Su efecto acumulativo permite un control estable con fluctuaciones mínimas en los niveles de presión a lo largo del día.

Uso común

Serpina está indicado para el tratamiento de la hipertensión arterial esencial de leve a moderada. Se emplea como monoterapia o, más frecuentemente, como parte de una terapia combinada con diuréticos u otros antihipertensivos para potenciar su efecto. Su uso está destinado a pacientes que requieren una reducción sostenida de la presión arterial y puede ser particularmente útil en casos donde la taquicardia es un componente significativo de la presentación clínica. No está indicado para el alivio de crisis hipertensivas agudas.

Posología y administración

La dosis debe individualizarse según la respuesta del paciente y la tolerancia al medicamento. La dosis inicial para adultos suele ser de 0.1 mg a 0.25 mg administrados por vía oral una vez al día, preferentemente por la noche para mitigar posibles efectos sedantes. La dosis de mantenimiento se ajusta gradualmente, generalmente en incrementos de 0.1 mg cada 1-2 semanas, hasta alcanzar el control deseado de la presión arterial. La dosis máxima recomendada no debe exceder los 0.5 mg al día. La administración debe realizarse con o sin alimentos, pero de manera consistente. Es crucial que el paciente no suspenda el tratamiento abruptamente.

Precauciones

Los pacientes deben ser monitorizados regularmente para evaluar la respuesta de la presión arterial y la aparición de efectos adversos, especialmente en las primeras semanas de tratamiento. Se recomienda realizar controles de la función renal y hepática de forma periódica. Serpina puede causar somnolencia o mareos, por lo que se debe advertir a los pacientes sobre la conducción de vehículos o el manejo de maquinaria pesada hasta que conozcan cómo les afecta el fármaco. Se debe usar con precaución en pacientes con historial de depresión, úlcera péptica o colitis ulcerosa. La hipotensión ortostática puede ocurrir, especialmente al inicio del tratamiento.

Contraindicaciones

Serpina está contraindicado en pacientes con hipersensibilidad conocida a la reserpina o a cualquiera de los excipientes de la formulación. Su uso está contraindicado en casos de depresión activa o historial de depresión severa, así como en la enfermedad de Parkinson. No debe administrarse a pacientes con feocromocitoma. Está contraindicado durante el embarazo y la lactancia debido al riesgo potencial para el feto y el neonato. Tampoco se recomienda su uso en pacientes con bradicardia severa o bloqueo cardíaco.

Posibles efectos secundarios

Los efectos adversos más comunes incluyen somnolencia, sequedad de boca, congestión nasal, mareos y diarrea. Con menor frecuencia, pueden presentarse náuseas, vómitos, anorexia, cefalea y síncope. A dosis más altas o en tratamientos prolongados, existe el riesgo de efectos más graves como depresión (que puede ser severa), parkinsonismo, discinesias, impotencia, disminución de la libido y pesadillas. Raramente, se han reportado reacciones de hipersensibilidad, anemia hemolítica y trombocitopenia. Cualquier signo de depresión debe ser evaluado inmediatamente por un profesional de la salud.

Interacciones medicamentosas

Serpina puede potenciar los efectos de otros depresores del sistema nervioso central, como alcohol, benzodiacepinas, opioides y antipsicóticos. La administración concomitante con inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO) está contraindicada debido al riesgo de crisis hipertensivas. Puede potenciar los efectos de los digitálicos y otros fármacos que causan bradicardia. Los diuréticos y otros antihipertensivos pueden potenciar el efecto hipotensor, requiriendo un ajuste de dosis. Los antidepresivos tricíclicos pueden antagonizar el efecto antihipertensivo de la reserpina.

Dosis olvidada

Si el paciente olvida una dosis, debe tomarla tan pronto como lo recuerde, a menos que esté cerca de la hora de la siguiente dosis programada. En ese caso, debe omitir la dosis olvidada y continuar con el horario regular. Nunca se debe duplicar la dosis para compensar la olvidada. La interrupción brusca del tratamiento debe evitarse, ya que puede provocar un rebote de la presión arterial o la aparición de síntomas de abstinencia.

Sobredosis

Los síntomas de una sobredosis pueden incluir hipotensión severa, bradicardia marcada, somnolencia profunda que progresa a estupor o coma, hipotermia, depresión respiratoria y midriasis. No existe un antídoto específico. El tratamiento es de soporte e incluye el mantenimiento de las funciones vitales, el control de la presión arterial con fluidos intravenosos y vasopresores si es necesario, y el manejo de las complicaciones. La diálisis no es efectiva debido al alto grado de unión a proteínas plasmáticas de la reserpina.

Almacenamiento

Conservar en su envase original, bien cerrado, a temperatura ambiente (entre 15°C y 30°C), protegido de la luz y la humedad. Mantener fuera del alcance y de la vista de los niños. No utilizar después de la fecha de caducidad impresa en el envase. Deseche cualquier medicamento que ya no necesite o que esté vencido de acuerdo con las instrucciones locales.

Descargo de responsabilidad

Este documento es para fines informativos únicamente y no sustituye el consejo médico profesional. La información proporcionada no pretende diagnosticar, tratar, curar o prevenir ninguna enfermedad. Siempre consulte a un médico o profesional de la salud calificado antes de iniciar, suspender o cambiar cualquier tratamiento. El uso de Serpina debe realizarse exclusivamente bajo prescripción y supervisión médica. El fabricante no se hace responsable del uso inadecuado de la información aquí contenida.

Reseñas

“Como cardiólogo con más de 20 años de experiencia, he incorporado Serpina en regímenes de tratamiento seleccionados para pacientes con hipertensión esencial. Su perfil de acción prolongada permite un control estable con una dosificación conveniente, aunque requiere una monitorización cuidadosa del estado de ánimo del paciente.” - Dr. Eduardo Morales, Cardiología. “Tras iniciar tratamiento con Serpina, mis niveles de presión arterial se han mantenido dentro de rangos normales por primera vez en años. El efecto es suave pero consistente. El único efecto secundario notable ha sido una ligera somnolencia al inicio, que desapareció después de la primera semana.” - María J., paciente. “Valioso agente de segunda línea en el arsenal antihipertensivo, particularmente en entornos con recursos limitados. Su eficacia y bajo costo lo convierten en una opción importante, aunque su perfil de efectos adversos exige una selección meticulosa de pacientes.” - Dra. Isabel Gutiérrez, Farmacología Clínica.