Eritromicina: Tratamiento Antibiótico Eficaz y Confiable

Digoxin

Digoxin

Digoxin is used for treating heart failure and slowing the heart rate in patients with chronic atrial fibrillation, a type of abnormal heart rhythm.
Product dosage: 0.25mg
Package (num)Per pillPriceBuy
900.62 $56.16 $ (0%)🛒 Add to cart
1200.58 $74.88 $ 69.03 $ (8%)🛒 Add to cart
1800.54 $112.32 $ 97.11 $ (14%)🛒 Add to cart
2700.51 $168.48 $ 136.89 $ (19%)🛒 Add to cart
360
0.49 $ Best per pill
224.64 $ 177.84 $ (21%)🛒 Add to cart
Synonyms

Similar products

La eritromicina es un antibiótico macrólido de amplio espectro, ampliamente utilizado en la práctica clínica para el tratamiento de infecciones bacterianas. Desarrollada a partir de la cepa Saccharopolyspora erythraea, este fármaco actúa inhibiendo la síntesis proteica bacteriana, demostrando eficacia contra una variedad de patógenos grampositivos y algunos gramnegativos. Su perfil de seguridad bien establecido y su versatilidad en formulaciones (oral, tópica, oftálmica e intravenosa) la convierten en una opción terapéutica fundamental. Este artículo proporciona información detallada para profesionales de la salud sobre sus características, usos y consideraciones clínicas.

Características

  • Clase farmacológica: Antibiótico macrólido
  • Mecanismo de acción: Inhibición de la síntesis proteica bacteriana mediante unión a la subunidad 50S del ribosoma
  • Espectro antibacteriano: Activo contra bacterias grampositivas (Staphylococcus, Streptococcus), algunos gramnegativos, micoplasmas, clamidias y espiroquetas
  • Formulaciones disponibles: Comprimidos, cápsulas, suspensión oral, ungüento oftálmico, crema tópica y solución inyectable
  • Vida media eliminación: Aproximadamente 1.5-2 horas en adultos con función renal normal
  • Metabolismo: Hepático, principalmente a través del citocromo P450 3A4
  • Excreción: Principalmente biliar (80-90%), renal (2-15%)

Beneficios

  • Eficacia comprobada en el tratamiento de infecciones del tracto respiratorio superior e inferior
  • Alternativa terapéutica para pacientes con alergia a penicilinas
  • Cobertura adecuada contra patógenos atípicos como Mycoplasma pneumoniae y Chlamydia trachomatis
  • Múltiples vías de administración que permiten adaptación a diferentes escenarios clínicos
  • Perfil de seguridad favorable con décadas de uso clínico documentado
  • Opción de dosificación flexible según peso corporal y gravedad de la infección

Usos comunes

La eritromicina está indicada para el tratamiento de diversas infecciones bacterianas, incluyendo faringitis estreptocócica, neumonía adquirida en la comunidad, bronquitis aguda, infecciones de piel y tejidos blandos, y profilaxis de fiebre reumática. También se emplea en oftalmología para conjuntivitis bacterianas y en dermatología para acné vulgar. En pacientes con alergia a beta-lactámicos, constituye una alternativa para la sífilis temprana y la profilaxis de endocarditis bacteriana. Su uso en infecciones por Campylobacter jejuni y Bordetella pertussis está bien establecido en guías clínicas.

Dosificación y administración

Adultos: 250-500 mg por vía oral cada 6 horas, o 500 mg-1 g cada 12 horas según formulación. La dosis máxima diaria no debe exceder 4 g.

Pediátrica: 30-50 mg/kg/día divididos en 3-4 dosis. Para profilaxis de fiebre reumática: 250 mg dos veces al día.

Administración: Las formas orales deben tomarse con alimentos para minimizar molestias gastrointestinales, aunque esto puede reducir ligeramente la biodisponibilidad. Las formulaciones intravenosas requieren infusión lenta para evitar flebitis.

Duración del tratamiento: Generalmente 7-14 días según la infección y respuesta clínica. En acné, el tratamiento tópico puede extenderse por varias semanas.

Precauciones

Monitorizar función hepática en tratamientos prolongados. Use con precaución en pacientes con prolongación del QT previa o factores de riesgo de arritmias cardíacas. Puede exacerbar la miastenia gravis. En insuficiencia renal severa (aclaramiento de creatinina <10 mL/min), considerar ajuste de dosis. La suspensión oral contiene sacarosa; considerar en pacientes diabéticos. Embarazo: Categoría B (uso aceptable si beneficio justifica riesgo). Lactancia: Se excreta en leche materna pero generalmente compatible.

Contraindicaciones

Hipersensibilidad conocida a eritromicina u otros macrólidos. Pacientes con historia de hepatitis inducida por eritromicina. Uso concomitante con medicamentos que prolongan el intervalo QT (terfenadina, astemizol, cisaprida). Miastenia gravis no controlada. Porfiria hepática.

Efectos adversos

Los efectos gastrointestinales son los más frecuentes (náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal) debido a efecto procinético. Menos frecuentemente: hepatitis colestásica, prolongación del QT, pérdida auditiva reversible (especialmente en insuficiencia renal o dosis altas). Reacciones de hipersensibilidad cutánea. Candidiasis oral o vaginal. Raramente: pancreatitis, síndrome de Stevens-Johnson.

Interacciones medicamentosas

Inhibe el citocromo P450 3A4, aumentando niveles de: warfarina, carbamazepina, teofilina, digoxina, estatinas, benzodiacepinas y anticonceptivos orales. Evitar concomitancia con ergotamina (riesgo de ergotismo). Antagonismo bacteriológico con beta-lactámicos. Antiácidos y bloqueadores H2 pueden reducir absorción. Potencia efectos de anticoagulantes orales.

Dosis olvidada

Administrar tan pronto como sea recordada. Si está cerca de la siguiente dosis, omitir la dosis olvidada y continuar con horario regular. No duplicar dosis para compensar.

Sobredosis

Manifestaciones incluyen náuseas severas, vómitos, diarrea y posible pérdida auditiva. El tratamiento es sintomático y de soporte. No existe antídoto específico. La diálisis no es efectiva debido a alta unión proteica y metabolismo hepático.

Almacenamiento

Conservar entre 15-30°C en envase original bien cerrado, protegido de luz y humedad. La suspensión reconstituida estable por 14 días refrigerada. No congelar. Mantener fuera del alcance de niños.

Descargo de responsabilidad

Esta información es para fines educativos de profesionales de la salud y no substituye el criterio médico. La decisión terapéutica debe basarse en evaluación individual del paciente, considerando factores clínicos, susceptibilidad bacteriana y guías actualizadas. Consulte literatura oficial del producto y referencias farmacológicas actuales.

Evaluaciones clínicas

La eritromicina mantiene un per favorable en revisiones sistemáticas para infecciones respiratorias y cutáneas, con eficacia comparable a otros macrólidos aunque con mayor incidencia de efectos gastrointestinales. Su papel como alternativa en alergia a penicilina está bien sustentado. Estudios recientes destacan su utilidad en contextos de resistencia emergente a otros antibióticos. La monitorización de interacciones y efectos adversos sigue siendo crucial para optimizar resultados.